Se dice que en Nueva York en 1874, un hombre se convirtió en la persona más buscada y más odiada de todos los tiempos. Sin embargo, nadie podía conocer a esta persona pues en realidad se trataba de un personaje ficticio.
La historia cuenta que todo fue una broma que circulaba en el año 1874 en Nueva York. Esta consistía en llegar a un bar y preguntar a alguien si conocía a un hombre llamado Tom Collins. Evidentemente este respondería negativamente ya que era totalmente ficticio. Una vez iniciada la broma únicamente quedaría decir que este tal Collins estaba hablando en otros bares mal de él, contando cosas feas y desagradables para que éste se enfadara. Todos aquellos que ‘cayeron’ en la broma de Tom Collins fueron, personalmente, precursores de la propagación de la broma en otros lugares llegando hasta tal punto que incluso los medios nacionales de comunicación de la época se hicieron eco de la broma.
La broma llegó a ser conocida como “El Gran Engaño de Tom Collins de 1874“. Dos años más tarde, el barman Jerry Thomas incluye una nueva bebida llamada Tom Collins en su libro “The Bartender’s Guide”
No queda claro quién fue su inventor, pero al menos sabemos el dónde y el porqué.
Otro posible origen del Tom Collins
Se dice que por el año 1890 vivió un londinense llamado John Collins. Era un gran barman que mezclaba muy bien la ginebra, el azúcar y el jugo de limón. Este hacía en un principio un trago con ginebra dulce, cuya marca más conocida era la Old Tom.
Se piensa que el origen del nombre de este cóctel es una combinación entre el nombre del barman y la marca de esta Ginebra Inglesa.
El trago consta de los siguientes ingredientes:
- 2 onzas de gin.
- 1/2 onza de jugo de limón.
- 1 onza de jarabe de goma.
- 1/4 de onza de soda.
- 4 cubos de hielo.
Su preparación es sencilla. Simplemente tomamos todos los ingredientes y los vertemos en un vaso. Le damos una movidita y listo. Lo adornamos con una rodaja de limón, una cereza roja y un par de cañitas.