Una tapa que nunca faltará en los bares o restaurantes de España, aunque para el crítico gastronómico del diario ABC, Carlos Maribona (@salsadechiles), estas “no siempre cumplen con las expectativas del comensal”. Por eso elaboró una guía de los destinos ideales para comer croquetas en el país.
Apreciadas por su textura crujiente y buen sabor, gracias a su relleno de salsa bechamel, jamón y otros ingredientes, es una de las opciones que no pueden pasarse por alto en una noche de tapeo.
Casa Marcial (Arriondas, Asturias)
En el hogar de Nacho Manzano, que ostenta dos estrellas Michelin, las croquetas son consideradas como un alimento de gran tradición. “Sus croquetas, que han creado escuela y ya se reproducen en muchos restaurantes de Asturias, son un auténtico espectáculo”, cita Carlos Maribona.
El crítico explica que las de Manzano se hacen con jamón ibérico, una bechamel bastante líquida y un rebozado muy ligero. “Estallan en la boca”, comparte.
Además, dice que pueden conseguirse en otros establecimientos de Manzano: La Salgar (Gijón) y Gloria (Oviedo y Gijón).
Echaurren (Ezcaray, La Rioja)
El restaurante y sus tapas ganaron popularidad gracias a los esfuerzos de Marisa Sánchez, quien, según Maribona, deslumbró a La Rioja. Marisa falleció en 2018 y el lugar pasó a manos de su hijo, Francis Paniego, quien ha sabido mantener la excelencia de la cocina, incluidas sus croquetas. Ostentan dos estrellas Michelin actualmente.
En su menú las tienen de jamón y de pollo, con un exterior bien crujiente y bastante cremosas por dentro. “Son auténticamente adictivas”.
Casa Gerardo (Prendes, Asturias)
Un sitio fenomenal para gozar de cocina típica de la mano de la familia Morán. Con una estrella Michelin y tres soles Repsol, ha sido uno de los más destacados para Maribona.
“Bechamel muy ligera, rebozado impecable y el intenso sabor de los ingredientes cárnicos (morcilla, chorizo y tocineta)”, son las particularidades que la hacen tan especial.
Santerra (Madrid)
Su concepto se enfoca en la gastronomía manchega histórica, sin dejar de lado otros clásicos españoles. Miguel Carretero es el cocinero del lugar, que cuenta con un espacio dedicado exclusivamente a las tapas.
Entre todas las opciones de bocados para conversar y pasar el rato, las croquetas se llevan las luces. Se hacen con jamón ibérico y son muy cremosas por dentro.
Taberna Pedraza (Madrid)
Carlos Maribona la describe como una de las tabernas más exitosas de la capital, en la actualidad, algo que han logrado trabajando arduamente. “Entre sus especialidades más demandadas, la tortilla de patata y unas croquetas de jamón de bellota superiores, tan cremosas que se deshacen en la boca”, cita el periodista.
Trivio (Cuenca)
El estilo de Jesús Segura le fue recompensado con una estrella Michelin en 2019. Su popularidad deriva del buen manejo que hace de productos y técnicas.
Sus croquetas se elaboran con jamón ibérico, pero su secreto está en el rebozado con corteza de pan artesanal.
Iván Cerdeño (Toledo)
Maribona aclara que actualmente no las posee en su menú, pero las croquetas del chef homónimo del establecimiento deben probarse sí o sí alguna vez. “Hay pocas como las suyas”.
Vinoteca Bernardina (San Sebastián)
Dirigido por Amaya Arzallus y Coro Beristain. Aunque algo alejado de las calles de tapeo en San Sebastián, debe hacerse un paseo por sus mesas para probar sus platos y maridarlos con sus vinos.
Su receta se centra en el jamón y cuenta con un “rebozado delicado y una bechamel bien cremosa”.
Central Bar (Valencia)
Ricard Camarena, uno de los chefs más revolucionarios de España en los últimos años, es el director de este proyecto gastronómico. El local es una referencia en Valencia.
El secreto de sus croquetas está en que se hacen de pollo, en una deliciosa base de bechamel.
El Mesón de Gonzalo (Salamanca)
Para Maribona, este es uno de los restaurantes más llamativos de la región de Castilla y León. Su chef es Gonzalo Sendín, quien continúa la tradición iniciada por su familia hace décadas.
Comenta que su barra está llena de delicias, donde las croquetas son la tapa que corona una gran oferta culinaria.
También le puede interesar: Restaurantes riojanos que bien merecen una visita
