El limón es un fruto que se puede conseguir en el mercado todo el año. Y esto se debe a que el limonero (de donde procede), es reflorescente y se pueden encontrar en un mismo árbol frutos y flores en distintos estados de madurez.
Por otra parte, el limón se presta bien a un almacenamiento prolongado, propiedad que ha sido aprovechada por los productores. Mediante técnicas sofisticadas, gran parte de las cosechas de ciertas variedades de limón se recolectan antes de que hayan desarrollado totalmente su coloración. Esto para después ser mantenidas en unas condiciones controladas de humedad y temperatura durante semanas e incluso meses. De esta forma, queda asegurado un suministro uniforme de fruta fresca.
Los limones se pueden conservar hasta una semana si se mantienen a temperatura ambiente. Sin embargo, para una conservación más prolongada se deben guardar en la nevera. Además, tanto el jugo como la cáscara se pueden congelar, mientras que la cáscara desecada o confitada se debe conservar en un lugar fresco y seco.
Cuatro opciones con el limón

Ahora bien, el limón como otras frutas y verduras, después de un tiempo, sea dentro o fuera de la nevera, se comienza a secar, se vuelve amarillento y le salen manchas. Quizás muchas veces cuando ocurre eso tendemos a botarlos, pero sepa que le puede dar algunos usos a esos limones viejos.
Por ejemplo, si la cáscara del limón está en buen estado, con un cuchillo se la puede retirar con cuidado y picarla finamente. Recuerde que esta es la parte más aromática de la fruta, y le puede servir para darle aroma y sabor cítrico a salsas, postres.
Cuando los limones están viejos, antes de echarlos a la basura, le pueden servir de ambientador. Los coloca en agua hirviendo con otros ingredientes aromáticos. Luego, este líquido lo puede guardar en un recipiente con rociador y darle un toque particular a su cocina.
También lo puede usar como desgrasante. Así que ese limón viejo sáquele el jugo que le queda y lo combina con un poquito de vinagre y bicarbonato de sodio. Esta mezcla le servirá como un limpiador multiusos.
El limón puede servir de repelente para varios insectos. Lo pica por la mitad y le introduce algunos clavos de olor en la pulpa. Esto puede ahuyentar a mosquitos y moscas.
También le puede interesar: Las anchoas, sepa cómo desalarlas