Los postres serán siempre el mejor recurso disponible para terminar una comida, o simplemente, para una merienda. Con el pasar del tiempo la repostería ha experimentado una evolución considerable.
Por ejemplo, las frutas, frescas, congeladas o en conservas sirven de base para numerosos postres y aportan una nota refrescante y saludable. Hay delicias que son más ligeras, con menos mantequilla, azúcar, huevos y crema de leche. Las coberturas de chocolate van del amargo al extra amargo, lo que permite apreciar mejor el sabor del chocolate, sin que el azúcar resulte empalagoso.
Elaborarlos en casa, dependiendo de la receta, puede ser más sencillo o complejo. Independientemente, hay tres reglas de oro para poder realizar deliciosos postres y pasteles
En primer lugar, es fundamental tener al alcance de la mano los utensilios necesarios para elaborar la receta. También pesar y medir con antelación los ingredientes que entran en la composición de la preparación y disponerlos en recipientes o cuencos. Y la tercera regla esencial es calentar el horno a la temperatura adecuada.
Para obtener buenos postres
El peso y las medidas no son cualquier cosa. Las recetas se refieren al sistema métrico. Para conseguir un resultado perfecto, le será útil disponer de un juego de cucharas de medir, así como unas balanzas y de un vaso graduado.
Como hemos dicho, al momento de preparar postres, son esenciales los instrumentos y utensilios necesarios, pero los tamaños indicados son ideales. Por ejemplo, si no dispone de un aro de repostería o de un molde con las medidas aconsejadas, utilice el material de que disponga similar a éstas.
El papel de silicona, que es antiadherente, resulta ideal para repostería. El papel sulfurizado es muy apropiado para cocer bizcochos, entre otros.
La temperatura del horno puede variar según el aparato. Así que debe estar muy pendiente de ese detalle. Por lo general, la mayoría tiene en casa hornos tradicionales; sin embargo, hay quienes usan horno de aire. Si este último es su caso, deberá reducir 20°C. Es decir, si la receta corresponde a 200°C en un horno tradicional, en el de aire debe estar a una temperatura de 180°C.
Consejos útiles
Ahora bien, para lograr el éxito en una receta, tanto del punto de vista gustativo como visual, es indispensable utilizar productos frescos y de calidad. Por ejemplo, los huevos deben ser frescos. Sepa cómo batir claras de huevo perfectamente.
La crema de leche, que se altera con facilidad y que tiene conservación limitada, debe ser de calidad, en caso de duda, utilice una pasteurizada.
La conservación y el almacenamiento en frío también son aspectos importantes, así como la higiene. Tenga siempre presente al preparar postres o cualquier receta en sí, desprenderse del reloj y cualquier joya. Estos objetos no resultan muy higiénicos y pueden provocar alergias, por no mencionar que las harinas y el azúcar glas tienen la facultad de introducirse en todas partes.
Para un buen desmoldado hay reposteros que recomiendan, si quiere conseguir unos bordes perfectos, colocar el postre sobre un objeto de 10 cm de altura y de una circunferencia inferior a la del molde y desmoldar por debajo. El proceso es algo delicado, pero de excelentes resultados.
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