Cilantro y perejil, dos hierbas aromáticas muy utilizadas en cocina, tienden a confundirse con mucha frecuencia, sobre todo, cuando estamos en el supermercado.
Si bien es cierto que se parecen mucho, de hecho, ambas vienen de la misma familia: las apiáceas, el cilantro y el perejil tienen diferencias muy particulares, no sólo en textura, sino también en olor y sabor. Así que veamos algunas consideraciones de cada una de ellas.
El cilantro es un aromatizante, desintoxicante, diurético y digestivo. La punta de sus hojas es redondeada y su tallo es un tanto triangular. Su color verde es más claro.
En cuanto a su olor, es más fuerte y penetrante, con notas cítricas que recuerdan al limón salado. El tamaño de esta planta aromática es mucho más largo, incluso, puede alcanzar hasta 70 centímetros de alto.
Por su parte, el perejil también se caracteriza por ser una hierba digestiva, diurética y antiinflamatoria muy útil. En cuanto a sus hojas, estas tienden a ser más bien puntiagudas. Su color verde es mucho más brillante y levemente más oscuro.
Con respecto a su olor y sabor, son mucho más suaves que el cilantro, con notas más herbales, mientras que de tamaño es más pequeño; por lo general mide entre 25 y 30 centímetros.
Cilantro y perejil, su uso en cocina
Ahora bien, cilantro y perejil son dos hierbas aromáticas que no pueden faltar en su despensa. La primera se utiliza por lo general en salsas, sopas, consomés, y le va muy bien para aliñar pescados y verduras.
En el caso del perejil, va muy bien como aromatizante de caldos, sopas, carnes y arroces. También en ensaladas y pescados. Si lo va a utilizar como condimento, el perejil común, de hojas planas, es mucho más aromático que el rizado.
De hecho, con ambas y otras hierbas, puede preparar infusiones. Aquí le decimos algunos remedios rápidos que puede hacer con ellas.
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