Las sopas frías más famosas

Las sopas son un plato muy reconocido en la gastronomía, ya que sus diversas preparaciones las convierten en dignas representantes de cada región; además de su versatilidad y facilidad al prepararlas. Las más conocidas son las sopas calientes, que en épocas de invierno son vitales; sin embargo, también existen las sopas frías que pueden acompañar platos principales o convertirse en uno en épocas de verano. Es por ello que traemos este compendio con la sopas frías más famosas.

Las sopas frías más famosas de todos los tiempos

Existen recetas de las mejores sopas frías de todo el mundo, muy fáciles de preparar y con ingredientes que resaltan lo mejor de cada región. Llenas de vegetales y vitaminas para complementar nuestra dieta, tenemos:

Gazpacho andaluz: Una receta típica de España que lleva aceite de oliva, vinagre, pepinos, pimientos, cebollas, ajos y su ingrediente principal, tomate. Dependiendo de ellos será el color de la sopa. Una buena opción para los amantes de los tomates.

Salmorejo: Otra receta española, el país de las sopas frías emblemáticas. Esta opción tiene tomate, ajo, cebolla, vinagre, aceite de oliva y migas de pan. Pero no cualquier pan, tiene que ser telera, un pan andaluz muy típico de esta región.

Vichyssoise: Una de las mejores sopas frías más famosas de Francia. Su receta contiene ajoporro, cebolla, papas, leche y nata. Es un poco más espesa pero su color blanco y textura cremosa es inconfundible.

Tzatziki: Esta sopa es muy diferente a las anteriores, es una receta típica de Turquía y Grecia, su ingrediente principal es el yogurt griego, pepino rallado, aceite, jugo de limón, perejil, menta y pimienta. Muy refrescante, perfecta para días de calor.

Crema fría de calabaza y naranja: En una zona de Marruecos llamada Doukala las calabazas son el ingrediente principal de su gastronomía. Es por eso que esta receta tienen una mezcla tan especial. La receta consta de calabazas, ajoporro, papas, naranja, aceite de oliva

Borsch: Hay para todos los gustos, esta sopa es un plato típico en la comida ucraniana y puede servirse frio o caliente. Se hace con remolacha, caldo de carde, pescado o de verduras, zanahoria, tomates, papas, cebollas y tocineta.

Estos platos además de refrescarnos son recetas muy fáciles y con pocas calorías, que ayudan a mantener un balance en la dieta requerida durante tiempos de mucho calor. Como plato principal o entrada, darle una oportunidad a nuevos sabores es una experiencia que nuestro cuerpo agradecerá.